25 de junio de 2009

FARRAH FAWCETT - un Angel de DIOS



A finales de los años 60 y a principios de los 70 se introdujo en el mundo de la publicidad, aprovechando un físico exuberante. Entre ellos, especialmente populares en EE.UU. fueron los anuncios de champú.

Sin embargo, el estallido de su fama a nivel mundial comenzó en septiembre de 1976, cuando fue contratada por Aaron Spelling para interpretar el papel de Jill Monroe en la serie de televisión Los ángeles de Charlie, y posteriormente por su papel de Mau Saurid, en ¿Quién bailó ese vals conmigo?. La imagen de Farrah se convirtió en una de las más reproducidas a escala planetaria y la serie llegó a convertirse en un auténtico fenómeno sociológico. La actriz, pese a ello, decidió abandonar la serie tras la primera temporada, siendo sustituida por Cheryl Ladd. Como había firmado contrato con la productora de Spelling, al abandonar la serie fue demandada y perdió, lo que le obligó a participar en seis capítulos en temporadas posteriores; durante ese período su nombre apareció acreditado en la serie como Farrah Fawcett-Majors.

La fama alcanzada le facilitó la posibilidad de intentar triunfar en el mundo del cine. Sin embargo, y pese a protagonizar la película de ciencia-ficción Saturno 3, de Stanley Donen, junto a Kirk Douglas, su carrera cinematográfica no alcanzó las expectativas previstas.

Vida personal [editar]La actriz estuvo casada entre 1973 y 1982 con el actor Lee Majors (de quien tomó el apellido durante esa etapa). Tras su separación en 1979, se unió sentimentalmente al también actor Ryan O’Neal. De la unión nació su hijo Redmond (en 1985).

Lucha contra el cáncer y muerte [editar]El 4 de octubre de 2006 se reveló que Fawcett sufría de cáncer colorrectal, por lo que se sometió a cirugía y quimioterapia.[1] Ante ello debió suspenderse indefinidamente una posible reunión del reparto original de Los ángeles de Charlie, ampliamente deseada por sus admiradores.

“Se está recuperando y pronto será dada de alta. Se siente muy bien. Su lucha continúa… No se va a ir a ningún sitio por el momento. No está al borde de la muerte”. Farrah “mantiene el buen ánimo con su habitual sentido del humor, y pronto será dada de alta".[10] Por desgracia, semanas después la enfermedad evolucionó a la etapa final, falleciendo en el hospital Saint John, de Santa Mónica, California, el 25 de junio de 2009[1